Caracterizaciòn de la teorìa Gestaltic

11.12.2014 19:48

Qué caracteriza la terapia gestalt?

Los terapeutas gestalt son conocidos por su interés en el “aquí y ahora”, es decir: qué pasa en el momento presente, como te sientes, qué piensas, qué son tus sensaciones corporales. Nuestro trabajo se dirige a ayudar a la persona a tomar conciencia de todos los aspectos de su experiencia. Al explorar juntos situaciones del pasado que todavía se reviven como dolorosas, o situaciones actuales que son una fuente de dificultades, se construye una relación que ayuda a la persona a tomar las riendas de su propia vida y a desarrollar nuevas maneras de entender el mundo.

Un pequeño ejemplo puede aclarar esto. Durante una sesión de terapia, un cliente explica que ha tenido recientemente una situación delicada con su jefe en la empresa durante una reunión de trabajo: “Me habló de una forma totalmente irrespetuosa. Pero bien, es igual. Yo debería haber sido más listo que él.” La persona cuenta esto mientras aprieto los puños. El terapeuta podría hacer notar que está pasando con sus manos e invitarle a explorar los sentimientos que se conectan con esto. Otra posibilidad seria decir: “Hablas de ser más listo que él. También puedo imaginar que ha sido para ti una situación bastante difícil…” Esta intervención puede ayudar a la persona a ser más consciente de sentimientos de tristeza o de enfado que habitualmente no tiene en consideración.

 

¿Qué pasa en una sesión de terapia gestalt?

En una sesión de terapia gestalt, el cliente y el terapeuta se encuentran frente a frente y dialogan. Durante la primera sesión exploran qué es lo que busca el cliente y el terapeuta contesta a sus preguntas. Se explicita el marco de la relación terapéutica: frecuencia y duración de los encuentros, tarifas, como modificar una cita y cuando se considerará que la terapia ha acabado. Si cliente y terapeuta están de acuerdo, el trabajo terapéutico puede empezar.

La persona es aceptada tal y como es, con sus áreas frágiles o inseguras, sin juicios o referencias a ningún modelo de conducta. El terapeuta te anima como cliente a que expreses todo lo que está presente para ti: cosas en las que piensas o que te preocupan, tus estados de ánimo, intuiciones, sentimientos, sensaciones, un sueño, una experiencia feliz; o una situación: algo del trabajo, con la familia, o incluso una película que has visto. Cualquier cosa puede ser la base para el trabajo puesto que el terapeuta te ayuda a tomar conciencia de las diferentes facetas de tu experiencia y a identificar qué son tus necesidades y aspiraciones actuales. Esto te ayuda a conseguir una libertad mayor y autonomía en tus elecciones vitales.

 

¿Para quién es la terapia gestalt?

La terapia gestalt puede ayudar con cualquier problema vital: timidez, una separación difícil, sentimientos de exclusión, trastornos psicosomáticos, ansiedad, trastornos de la alimentación, conflicto existencial, problemas relacionales, etc. Está dirigida a cualquier persona que esté en búsqueda de si misma, que esté sufriendo y necesito algo de ayuda por atravesar un momento de crisis o de desequilibrio en su vida personal, social o profesional. Si la situación lo requiere el terapeuta trabaja con un equipo multidisciplinar, que puede incluir un psiquiatra si, por ejemplo, es necesario un apoyo con antidepresivos.

 

Un poco de historia

Gestalt viene de la palabra alemana gestalten, que significa “dar forma, estructurar”. La terapia gestalt nació durante los años 50 del siglo XX en los Estados Unidos de América y llegó en Europa durante los años 70. Pertenezco al cabo de la calle de las psicologías humanistas, existenciales y relacionales, y tiene como objetivo desarrollar la autonomía, la responsabilidad y la creatividad de las personas. No se limita a un punto de vista individualista de los seres humanos sino que está muy interesada en las interacciones del individuo con su entorno, sea en el entorno personal, profesional o social.

 

Código ético

Un terapeuta gestalt sigue un código ético que protege al paciente y ayuda a la terapia. Este código ético exige que el terapeuta se abstenga de cualquier abuso de poder con respecto a los suyos clientes, a mantener una formación continuada y a admitir las limitaciones de la ayuda que puede prestar en cada caso. El trabajo terapéutico se realiza bajo las reglas de la confidencialidad y el secreto profesional. La prioridad del terapeuta es el cliente, la dignidad del cliente, su integridad y su libertado de elección.